SISTEMA JALON

La aportación total, en régimen natural es de 551,33 hm³/año, de los que un 28,7% (158,00 hm³) corresponden al Jiloca, su afluente más importante, y un 19,7% (108,58 hm³) al Piedra.

SITUACIÓN ACTUAL

En la actualidad dichos recursos están regulados fundamentalmente por tres embalses: La Tranquera (78,80 hm³) en el río Piedra, Maidevera (17,94 hm³) en el río Aranda y Monteagudo de las Vicarías (8,87 hm³) en derivación y alimentado con las aguas del río Nágima. Además cuenta con la regulación de acuíferos muy significativos, en especial en el Jiloca (60 hm³), siendo generales las surgencias subterráneas: Fuente de Cella, Ojos de Monreal, manantiales del Aranda, etc.

Otros pequeños embalses existentes en la cuenca son los de La Hoz y Niño Jesús en la Rambla de Ribota.

Demandas a servir

Demandas consuntivas

Demandas no consuntivas

A falta de estudios específicos se adopta como caudal de compensación el 10% de la aportación media interanual en el emplazamiento de las presas. Consiguientemente, debe mantenerse un caudal mínimo medioambiental en el río Piedra, aguas abajo de la presa de La Tranquera, de 10,64 hm³/año, en el río Nágima, aguas abajo de la presa de Monteagudo de las Vicarías, de 1,34 hm³/año, y en el río Aranda, aguas abajo de la presa de Maidevera, de 0,59 hm³/año.

Demanda servida consuntiva

La demanda total servida por el sistema es de 308,78 hm³/año, lo que representa un 56% de la aportación media interanual, y el déficit de 33,46 hm³/año. El modelo refleja déficits en todos los regadíos de la cuenca, no cumpliéndose, en general, los tres criterios de vulnerabilidad. Es consecuencia de la falta de regulación del sistema, que además de la natural de los acuíferos, únicamente cuenta con el embalse de La Tranquera para regular los regadíos del eje del Jalón y con las de Monteagudo de las Vicarías (para regulación de los regadíos del Nágima) y Maidevera (para los del Aranda), no existiendo otras regulaciones en los afluentes del Jalón salvo pequeños embalses y/o balsas de regulación.

La demanda consuntiva regulada por el sistema con garantía superior al 90% es tan sólo de 18,2 hm³/año, lo que representa únicamente un 3,28% de la aportación media interanual y un 5,86% del total servido por el sistema.

 Conclusión

Estos pequeños porcentajes evidencian principalmente la insuficiencia del embalse de La Tranquera para regular todos los regadíos del eje del Jalón. No obstante, se puede observar en el cuadro y gráfico adjuntos que rápidamente aumenta a 126,4 hm³/año y a 225,5 hm³/año si las garantías de suministro disminuyen a 85% y 80% respectivamente. Este hecho es suficientemente explícito como para asegurar que un ligero aumento de la capacidad de almacenamiento del sistema, particularmente de La Tranquera, repercutirá claramente en incrementar el volumen regulado por el sistema (22,93% y 40,90% de la aportación media interanual, respectivamente), ya que los volúmenes servidos actualmente con garantías del 85 % y 80 % pasarían a servirse con garantía superior al 90%.

Demanda servida no consuntiva

En lo que respecta a las demandas no consuntivas, el modelo refleja que se garantizan los caudales de compensación, en el tramo del río Piedra aguas abajo de la presa de La Tranquera (100 %), en el Nágima aguas abajo de la presa de Monteagudo (98%) y en el Aranda aguas abajo de la presa de Maidevera (99 %).

Ver tabla y gráfico:

SITUACIÓN FUTURA (Primer Horizonte)

En el primer horizonte, la gestión de la explotación del sistema se ha simulado con el embalse de La Tranquera recrecido (85,35 hm³), en el río Piedra, con el embalse de Lechago, en el río Pancrudo (20,00 hm³) con trasvase desde el río Jiloca y con el embalse de Mularroya (112,00 hm³) en el río Grío, alimentado con las aguas trasvasadas desde el Jalón, además de las regulaciones existentes en la actualidad.

Demandas a servir

Demandas consuntivas

Demandas no consuntivas

A falta de estudios específicos se adopta como caudal de compensación el 10% de la aportación media interanual en el emplazamiento de las presas y de las obras de derivación más importantes. Además de los caudales ya explicitados para la situación actual, deben mantenerse caudales de 1,03 hm³/año, en el río Grío aguas abajo de la presa de Mularroya, de 59,64 hm³/año, en el río Jalón aguas abajo de la toma del canal alimentador del embalse de Mularroya, de 2,76 hm³/año, en el río Pancrudo aguas abajo de la presa de Lechago y de 10,52 hm³/año, en el río Jiloca aguas abajo de la toma del canal alimentador del embalse de Lechago.

Demanda servida consuntiva

La demanda total servida por el sistema es de 353,18 hm³/año, lo que representa un 64% de la aportación media interanual, y el déficit de 18,56 hm³/año. El modelo refleja pequeños déficits en las demandas de riegos dependientes de los embalses reguladores cumpliéndose, en general, los tres criterios de vulnerabilidad. Mayores déficits se producen en afluentes no regulados. Es consecuencia de la falta de regulación de dichos afluentes. Estos déficits quedarán cubiertos con las regulaciones previstas, de carácter local, tales como los embalses de Valcodo en el río Jiloca, Trasobares en el Isuela, etc., que al no influir en la regulación general del sistema no se han incorporado al modelo de simulación.

La demanda consuntiva para abastecimiento, regadíos e industria regulada por el sistema con garantía superior al 90% asciende en este horizonte a 244,40 hm³/año, lo que representa un 44,33% de la aportación media interanual y un 69,20% del total servido por el sistema.

 Conclusión

Estos porcentajes evidencian la consolidación de la mayor parte de los regadíos del eje del Jalón. Unicamente los del bajo Jalón, en el tramo Rueda-Ebro, presentan garantías inferiores al 90%, concretamente del 87% y 85%. Resulta evidente, por tanto, que un pequeño aumento en la regulación del sistema sería claramente favorable, ya que la demanda garantizada ascendería a 328,8 hm³/año, lo que representaría un 59,64% de la aportación media interanual y un 93,10% del total servido por el sistema.

Demanda servida no consuntiva

En lo que respecta a las demandas no consuntivas, se garantizan totalmente los caudales de compensación, en el tramo del río Piedra aguas abajo de la presa de La Tranquera, en el Nágima aguas abajo de la presa de Monteagudo, en el Aranda aguas abajo de la presa de Maidevera, en el Grío, aguas abajo de la presa de Mularroya, en el Pancrudo, aguas abajo de la presa de Lechago, y en las tomas de los canales alimentadores de Mularroya y Lechago.

Ver tabla y gráfico:

SITUACIÓN FUTURA (Segundo Horizonte)

En el horizonte de 20 años, la gestión de la explotación del sistema se ha simulado con las regulaciones existentes en el primer horizonte, más una regulación en cabecera (embalse de Valladar) de 20 hm³ de capacidad de embalse.

Demandas a servir

Demandas consuntivas

Demandas no consuntivas

Se han impuesto los mismos caudales que figuraban en la simulación de la explotación del sistema en el primer horizonte.

Demanda servida consuntiva

La demanda total servida por el sistema es de 393,48 hm³/año, lo que representa un 71% de la aportación media interanual, y el déficit de 23,92 hm³/año. El modelo refleja pequeños déficits (aunque superiores a los producidos en el primer horizonte), en las demandas de riegos dependientes de los embalses reguladores cumpliéndose, salvo en la cuenca baja del Jalón, los tres criterios de vulnerabilidad. Mayores déficits se producen, en la simulación efectuada, en afluentes no regulados, si bien, no lo serán ya que para este horizonte se suponen ejecutadas las regulaciones locales a las que se hizo referencia al analizar la situación al primer horizonte. Además de las allí citadas, en este horizonte se plantean, entre otras, la de Carabán-Moros en el río Manubles.

La demanda consuntiva para abastecimiento, regadíos e industria regulada por el sistema con garantía superior al 90% asciende a 260,1 hm³/año, lo que representa un 47,18% de la aportación media interanual y un 66,10% del total servido por el sistema.

Conclusión

Estos porcentajes evidencian la consolidación de la mayor parte de los regadíos del eje del Jalón. Unicamente los del bajo Jalón, en el tramo Rueda-Ebro, presentan garantías inferiores al 90%, concretamente del 83%, inferiores a las del primer horizonte, ya que la superficie de riego se ha incrementado en 3.000 ha nuevas, más otras 1.300 ha (700 ha en el tramo Aranda-Grío y 600 ha en el tramo Piedra-Jiloca). Resulta evidente, por tanto, que se está en el límite de la regulación de este sistema con las regulaciones previstas por el Plan.

Demanda servida no consuntiva

En lo que respecta a los caudales de compensación se garantizan plenamente (100%), exceptuando el impuesto en la toma del canal alimentador del embalse de Mularroya que presenta una garantía del 99%.

Ver tabla y gráfico: